En un contexto pospandemia donde la venta online está ganando cada vez más relevancia, ha aparecido una nueva tendencia que se alimenta del auge de redes sociales como Instagram, TikTok o Facebook. Hablamos del social commerce, el ecommerce que utiliza las redes como canal de venta. Se trata de una de las grandes tendencias del comercio en línea, y una buena oportunidad para los pequeños negocios y empresas que acaban de iniciarse en la venta digital.
¿En qué consiste el social commerce? A través del perfil de tu negocio, los clientes pueden acceder a un catálogo de productos, consultar precios y condiciones de envío, obtener ayuda e información, y leer los comentarios de otros usuarios para terminar haciendo la compra. Todo esto, sin salir de la plataforma.
Diferencia entre social commerce y ecommerce
Para empezar, hay que diferenciar el social commerce del ecommerce. Son dos conceptos que se pueden confundir, ya que están inevitablemente vinculados, pero que presentan importantes diferencias en cuanto al comportamiento del usuario.
Podemos entender el social commerce como una extensión del comercio electrónico que utiliza el poder de las redes sociales para convertirlas en un canal de venta. Mientras que el ecommerce tiene lugar en la web de la empresa y se enfoca en el producto, el social commerce se orienta al consumidor y va a buscarlo directamente en las plataformas que este utiliza.
Otra diferencia es que, en el social commerce, el ciclo de compra parte de la experiencia social de los usuarios. Además, el proceso no está influenciado por el posicionamiento y la publicidad, dos de los grandes protagonistas del ecommerce tal como lo conocemos.
Ventajas del social commerce
- 1. Potencial para llegar a un gran público
Imagina acceder a un mercado con millones de potenciales clientes que pueden estar interesados en obtener tus productos. Uno de los grandes atractivos del social commerce es su capacidad para llegar a las grandes masas. Aprovechando el gran número de usuarios que navegan por las redes se multiplican tus posibilidades de conseguir difusión y llegar a nuevos clientes.
- 2. Atraer tráfico a tu web
Pese a que algunas redes empiezan a implementar las compras en la misma plataforma, en la mayoría de los casos el proceso de social commerce termina en la web de la empresa que ofrece el producto. Esto es una buena noticia para tu negocio, puesto que atraerás más tráfico hacia tu web, generando interés en otros productos e incrementando el número de conversiones.
- 3. Establecer una relación de confianza
Hacerte accesible para los clientes a través de las redes sociales es una de las mejores maneras de crear confianza y garantizar que vuelven a comprar tus productos. En este proceso tienen un papel muy importante los comentarios y las reseñas de otros clientes, que sirven como garantía de calidad e invitan a comprar el producto.
- 4. Mejorar el engagement
Si las redes sociales tienen una ventaja destacable, es su gran capacidad para facilitar la comunicación entre empresa y cliente. Esta puede ser a través de un chat o los comentarios de la publicación.
Los clientes que contactan a través de un perfil de redes acostumbran a obtener una respuesta más rápida y personalizada, cosa que incrementa las posibilidades de que finalicen la compra.
¿Por qué incorporar el social commerce en tu negocio?
Apostar por el social commerce es una de las mejores decisiones que puedes tomar para hacer crecer tu negocio, especialmente si es pequeño, fue creado recientemente o no dispone todavía de página web.
Una vez empiezas a utilizar las redes sociales para el comercio, puedes aumentar rápidamente la visibilidad de tu marca, conseguir clientes y crear una reputación online sólida, basada en las experiencias compartidas por los usuarios que están satisfechos con tus servicios. También podrás monitorizar fácilmente cualquier feedback negativo y centrar tus esfuerzos en solucionar todo lo que no funciona.
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Como empezar a vender por las redes
Para iniciarte en el social commerce, uno de los primeros aspectos que debes tener en cuenta es en qué red social se encuentran tus clientes. No se trata de escoger la plataforma de moda, sino la que más se adapta a tu negocio. También tendrás que definir un objetivo para tu plan de venta por redes.
Una vez tengas claro lo que quieres conseguir, es el momento de diseñar y poner en marcha una potente estrategia de social commerce. Ofrecer descuentos, hacer concursos y premiar las reseñas son algunas de las acciones que te ayudarán a conseguir nuevas ventas. Todo esto, acompañado de un contenido atractivo y un servicio de calidad.